Las exigencias de los consumidores, tanto a nivel nacional como internacional, en lo relativo al bienestar animal, han tenido como consecuencia que la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) junto con el Ministerio de Consumo, hayan decidido legislar para acabar con la posibilidad de que se pueda producir maltrato a los animales en todo el proceso productivo con la instalación de cámaras de seguridad en mataderos.
Por este motivo, se ha llevado a cabo una consulta pública como primer paso para promulgar un futuro Real Decreto que, fundamentalmente, obligará a instalar cámaras de video vigilancia en todas las instalaciones donde se realicen sacrificios de animales.
La necesidad de esta nueva normativa viene siendo una antigua aspiración tanto de los grupos que tradicionalmente han considerado que la legislación existente era insuficiente como de la propia AESAN. Ambos consideran que el actual reglamento europeo 1099/2009, cuya disposición nacional está recogida en el Real Decreto 37/2014 y cuyo objetivo era el de regular el bienestar animal en el momento del sacrificio, no llegaba a cumplir con precisión el objetivo que se había perseguido al promulgarlo.
¿Qué es lo que se ha estado haciendo hasta ahora para garantizar el bienestar animal?
Siguiendo las indicaciones del anterior reglamento, se designaba a un encargado de bienestar animal, cuya responsabilidad era cuidar en todo momento del correcto desarrollo de todo el proceso de sacrificio de los animales, así como de garantizar las buenas prácticas correspondientes a este proceso, entendiendo el “sistema de aturdimiento” como parte fundamental de esta buena praxis.
¿Cómo ha sido posible este cambio de mentalidad?
Los consumidores son cada vez más exigentes con lo que compran y quieren tener más información sobre los productos alimenticios que consumen. Además de la composición, quieren conocer todo el proceso producción, en qué condición viven y mueren los animales que componen los productos cárnicos que se adquieren.
El sector cárnico, bajo estricta vigilancia de múltiples organizaciones animalistas, tiene ante sí dar el último paso para garantizar en todo su proceso productivo, una total transparencia que satisfacer hasta al más exigente de los consumidores.
La instalación de cámaras de seguridad en los mataderos permitiría demostrar de manera fehaciente e inequívoca, el compromiso del sector con la transparencia, y el total cumplimiento de la futura normativa, cuyo primer paso, tal y como ya se ha indicado, lo constituye la consulta pública.
Objetivos de las cámaras de seguridad en mataderos
Aunque la satisfacción del consumidor a través de la transparencia del proceso productivo es el objetivo prioritario, la instalación de estas cámaras tendría también otros objetivos:
- La detección a tiempo de malas prácticas relacionadas con el bienestar animal.
- Mejorar los procesos productivos de las propias empresas.
- Garantizar la plena seguridad alimentaria.
- Mejorar la imagen del sector ante los consumidores.
¿Cuál es el siguiente paso tras esta consulta?
El plazo para enviar las opiniones finaliza el 23 de octubre. A partir de esa fecha se iniciará el proceso de tramitación inherente a todo Real Decreto hasta su aprobación definitiva, que no se demorará mucho en el tiempo.
¿Están tus instalaciones preparadas para cuando entre en vigor el Real Decreto?
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