Los sistemas de alarma son la herramienta preventiva más eficaz para evitar la intrusión a una vivienda o a un negocio. Hoy en día, las opciones técnicas existentes en el mercado permiten poder elegir entre opciones diferentes según nuestra conveniencia e incluso preferencia. Lo que todas las opciones técnicas comparten es que deben ajustarse al GRADO que la normativa nos dicta como necesario para la instalación a realizar. Pero, ¿qué son los grados de seguridad un sistema de alarma?
Grados de seguridad de un sistema de alarma: niveles.
El Grado de seguridad de los sistemas de alarma es la forma en que la normativa de seguridad privada emitida por el Ministerio del Interior clasifica los sistemas de alarma. El tipo de local a proteger define el Grado mínimo que deberá tener el sistema según la clasificación hecha por dicha normativa.
Según la normativa, los Grados de seguridad catalogados así:
- GRADO 1 (riesgo bajo): se corresponde con sistemas de alarma que NO van a estar conectados a una Central Receptora de Alarmas. Se refiere a sistemas de alarma donde el usuario los gestiona por su cuenta. En este Grado no está permitido el funcionamiento de una sirena exterior ni tiene el amparo del protocolo de seguridad para aviso por parte de la Central Receptora a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, por lo que es el usuario quien debe gestionar directamente ese aviso y las fuerzas policiales han de atenderlo como si se tratara de una petición más de cualquier otra índole cursada por un ciudadano.
- GRADO 2 (riesgo bajo a medio): orientado a viviendas y pequeños establecimientos, comercios e industrias en general, que pretendan conectarse a una Central Receptora de Alarmas o, en su caso, a un centro de control.
- GRADO 3 (riesgo medio/alto): orientado a establecimientos obligados a disponer de medidas de seguridad, así como a otras instalaciones comerciales o industriales a las que por su actividad u otras circunstancias se les exija disponer de conexión a Central Receptora de Alarmas o, en su caso, a un centro de control.
- GRADO 4 (alto riesgo): reservado a las denominadas infraestructuras críticas, instalaciones militares, establecimientos que almacenen material explosivo reglamentado, y empresas de seguridad de depósito de efectivo, valores, metales preciosos, materias peligrosas o explosivos, requeridas, o no, de conexión con Central Receptora de Alarmas o, en su caso, a centros de control.
Y para mí, que quiero instalar un sistema de alarma, ¿qué grado me corresponde?
Vamos a tratar de explicar cómo nos afecta esta clasificación de Grado de seguridad si queremos instalar un sistema de alarma
Alarma de grado 1: Riesgo bajo.
Cualquier sistema de alarma que no vaya a conectado a una Central Receptora de Alarmas es considerado Grado 1. De hecho, aunque el sistema esté compuesto por materiales de Grado 2 o 3 se considera de Grado 1 en su totalidad, porque el Grado de un sistema de alarma no lo define solo los materiales, sino también su diseño, distribución y modo de conexión con una Central Receptora de Alarmas.
Por el contrario, si queremos que nuestro sistema de alarma vaya conectado a una Central Receptora de Alarmas, siempre tendrá que estar compuesto por materiales cuyo grado mínimo será el 2.
No está permitido tener un sistema sin conexión a una Central Receptora de Alarmas cuando este deba proteger instalaciones donde se exija un sistema de alarma de Grado 3 (más adelante, veremos a qué tipo de instalación se le exige Grado 3).
Alarma de grado 2: Riesgo medio
Cualquier sistema de alarma que vaya conectado a una Central Receptora de Alarmas y no sean locales a los que se les obligue a un Grado 3 o 4, tiene el Grado 2.
Es el tipo de Grado más frecuente y afecta a la mayoría de las instalaciones que se llevan a cabo.
En cuanto al sistema, algunos requisitos de Grado 2 a destacar son:
- Que todo el material sea al menos de Grado 2.
- Todo el cable que conecta a los distintos elementos debe ser material homologado según normativa.
- Ha de ser instalado por una empresa homologada.
- El sistema debe de contar con algún medio de verificación que facilite descartar falsas alarmas
Los medios de verificación son varios: secuencial por sensores de alarma; video verificación; personal. En función del tipo de instalación y los medios técnicos y/o humanos disponibles, se puede utilizar una o varias a conveniencia del cliente.
Alarmas de grado 3: Riesgo medio-alto
Este Grado de seguridad va destinado a instalaciones donde el riesgo de atraco es elevado por tener objetos de valor. Se refiere a locales como: joyerías, salones de juego y bingos, administración de loterías, sucursales bancarias o entidades de crédito, estaciones de servicio y suministro de combustibles, farmacias, galerías de arte y otras entidades o locales donde existen bienes de alto valor o dinero en efectivo.
En cuanto al sistema propiamente dicho, algunos requisitos de Grado 3 a destacar son:
- Todo el material ha de ser al menos de Grado 3.
- Todo el cable que conecta a los distintos elementos debe ser material homologado según normativa.
- El sistema debe estar conectado con la Central Receptora de Alarmas por dos vías físicas diferentes, siendo normalmente éstas una conexión de internet por cable y una línea de red móvil.
- Ha de ser instalado por una empresa homologada.
- El sistema debe cumplir con el concepto de verificación secuencial.
- El sistema debe de contar con algún medio de verificación que facilite descartar falsas alarmas.
Alarmas de grado 4: Riesgo alto
Esta categoría está destinada a infraestructuras críticas como: instalaciones militares, almacenes de explosivos, empresas con gran cantidad de efectivo o aquellos espacios que el Gobierno ha catalogado como “críticos”.
Las diferencias técnicas para este Grado, aparte de que todo material cumpla con Grado 4, tienen que ver con la fortaleza y redundancia de las medidas de seguridad, tratando de blindar la instalación hasta el punto donde no quede desprotegida a pesar de que se puedan suceder varios fallos técnicos. Por ello, en este nivel de seguridad también se especifica detalles incluso constructivos como tipos de material del edificio o anchuras de las paredes.
Marco jurídico sobre la instalación de sistemas de alarmas.
Existe una normativa española que establece los diferentes grados de seguridad de las alarmas y además existen una serie de certificados comunitarios con los que deben de contar los sistemas de alarma dependiendo del grado de protección exigido.
Es, pues, imprescindible para evitar imprevistos tanto a nivel de seguridad como con las aseguradoras en caso de que se produjera una incidencia, contar con una empresa especializada y homologada que cumpla con todas las normativas y consiga un 100% de eficacia en su objetivo de velar por su seguridad.
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