Para hablar de robos con fuerza, debemos empezar por conocer las diferencias entre los diferentes tipos de robos, ya que las medidas de seguridad en una nave industrial deben de evitar cualquiera de ellos. En el siguiente enlace podrás ver con datos estadísticos la cantidad de delitos según su tipología cometidos en España en 2019.
Dentro del Código Penal existen diferentes tipos de robos que responden a un castigo determinado. En el Título XIII la Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal, se especifican los delitos contra el patrimonio y el orden socioeconómico. En este apartado, se indica que el robo es un “delito contra el patrimonio, consistente en el apoderamiento de bienes ajenos, con intención de lucrarse, empleando para ello fuerza en las cosas o bien violencia o intimidación en la persona”. Es aquí donde se ve claramente las diferencias entre un robo y un hurto.
Tipos de robos en España:
- Hurtos: El artículo 234, del Código Penal, define el hurto como: “El que, con ánimo de lucro, tomare las cosas muebles ajenas sin la voluntad de su dueño será castigado, como reo de hurto”. En este caso las penas de prisión varían en función de la cuantía sustraída y puede ir desde los seis a ocho meses de cárcel siempre que no se exceda de los 400 €.
- Robos con violencia: En este caso, el ladrón utiliza la intimidación compulsiva o fuerza física para conseguir lo que quiere. El delincuente se puede encontrar con un año o tres de presión dependiendo de la gravedad del caso.
- Robo con fuerza: Si antes de empezar a leer esto no sabías la diferencia entre robo con violencia o con fuerza, ahora seguro que no te queda ninguna duda. El culpable de un robo podría ser acusado de “robo con fuerza” y castigado con pena de prisión de uno a tres años cuando se de alguna de estas circunstancias:
-
- Uso de llaves falsas.
- Fractura de armarios, arcas u otra clase de muebles u objetos cerrados o sellados, o forzamiento de sus cerraduras o descubrimiento de sus claves para sustraer su contenido, sea en el lugar del robo o fuera del mismo.
- Rompimiento de pared, techo o suelo, o fractura de puerta o ventana. -Escalamiento
Naves industriales en el ojo del huracán de los robos con fuerza
Como ocurrió con la Operación Ibérico en León a principios de año, esta organización criminal se especializó en los robos con fuerza en naves industriales vinculadas principalmente al sector de la alimentación. A través del método del “alunizaje” consiguieron extraer cerca de 100.000 € en productos de alimentación. Una vez realizaban los robos, los coches utilizados eran calcinados para eliminar pruebas.
En este caso, los sistemas de seguridad instalados en las diferentes naves industriales donde se produjeron los robos con fuerza, pudieron ayudar a las Fuerzas de Seguridad a capturar a esta banda de delincuentes que llevaban desde el verano de 2019 asaltando naves industriales en las provincias de León y Madrid.
En muchos de estos casos, contar con una empresa de seguridad para evitar robos con fuerza que garantice la protección de los bienes y la seguridad de las personas, puede ahorrar muchos disgustos y sobre todo dinero.
Realizar un estudio de los puntos críticos tanto del polígono industrial en su conjunto como de una nave industrial en particular, es fundamental para confeccionar el protocolo de seguridad. Un sistema de medidas de seguridad física con puertas y ventanas sólidas, perímetro vallado junto con sistemas de seguridad electrónica como pueden ser un sistema de alarmas, video vigilancia homologado, videoanálisis, sistema de control de accesos, complementado con servicios de seguridad por vigilantes, garantizan la seguridad integral de las instalaciones y del personal.
Según nuestra experiencia, los robos que se vienen produciendo en polígonos industriales donde existe un servicio de seguridad con vigilantes, es de dos tipos:
- Robos al descuido. Son robos o hurtos que se realizan en las instalaciones de las empresas cuando están en plena actividad. Durante la jornada laboral y sobre todo en las horas del bocadillo o la comida. Suelen ser fallo de las medidas de seguridad, como dejarse puertas abiertas, mercancía en la calle sin vigilar, baterías de vehículos, chatarra, etc.
- Robos con fuerza. Preferentemente en empresas que o bien no disponen de ningún tipo de sistema de alarma, o tienen sistemas de alarma obsoletos.
Estos intrusos suelen roban dinero en metálico y prácticamente no se han dado casos de robo de mercancía, por el riesgo que supone acceder con un vehículo a la empresa y el tiempo que lleva cargarlo.
Las empresas que tienen instalado un buen sistema de alarma, si es posible con cámaras de seguridad, y unas medidas de seguridad física con puertas y ventanas sólidas, difícilmente son objetivo de los ladrones, por el efecto disuasorio que supone. Todo ello combinado con la rápida actuación de los vigilantes de seguridad del polígono, que hace que aunque pueda haber una intrusión en las empresas impide que se pueda consumar el robo.
En el caso de que no exista servicio de seguridad en ese polígono el tiempo que disponen los delincuentes para perpetrar el robo es mucho mayor y por tanto suelen conseguir sus objetivos.
Leave a Comment